la Asociación Española del Gas (Sedigás) publicaba un comunicado en el que se aseguraba que, si se contemplase el gas como “energía clave” en la nueva ley de cambio climático y transición energética, España podría alcanzar los objetivos de descenso de dióxido de carbono (CO2).
Entre las propuestas que plantea Sedigás para la futura ley española de cambio se encuentra el establecimiento de un modelo energético sostenible económicamente, priorizando las acciones con tecnologías probadas y de coste asumible y promocionar la sustitución de combustibles por otros menos contaminantes.
Además, en su defensa por el gas natural, Sedigás asegura que es un combustible limpio que garantiza una combustión libre de partículas y con cero emisiones de dióxido de nitrógeno (NO2).
Una de las medidas que propone esta asociación es la de cambiar los sistemas de calefacciones a gas, ya que puede suponer una forma “rápida y barata” de reducir las emisiones del sector residencial hasta en un 55%.
Asimismo, aseguran que las calderas de condensación presentan hasta un 65% más de eficiencia que sus tecnologías competidoras. Los ciclos combinados, que aportan firmeza, flexibilidad y una potencia ya instalada, son «garantes» de la estabilidad del sistema eléctrico además de una tecnología limpia, pues aumentar la generación a gas disminuiría las emisiones hasta en un 66%.